Poveda y su ArteSano(2)



Impresionate ficha.


Demasiado tiempo llevabamos esperando un disco de esta índole en el mundo flamenco, sobre todo de aquellos artistas que ocupan la primera fila del escalafón mediático.

Hasta 13 cantes contiene ArteSano de los que Miguel sale triunfante en la mayoría y que cuenta con al producción de José Quevedo, EL Bolita y el aroma de Isidro Muñoz. El acompañamiento reune a dos grandes históricos de la sonanta flamenca, Paco de Lucía y Manolo Sanlucar pero además algunos de las mejores guitarras de la actualidad desde Diego del Morao, Manuel Parrilla o Chicuelo hasta un sorprendente Jesús Guerrero, Juan Ramón Caro o los propios Isidro Muñoz y Bolita.

La percusión corre a cargo de Paquito González, un primer espada del compás y las palmas de Carlos Grilo y Luís Cantarote, además de un "cameo" que se da por bulerías de Cádiz el de la poquita voz e infinita profundidad, Rancapino.

En el libreto escribe, como no, José Manuel Gamboa, que titula ArcoIris Cantaor la introducción al disco y deja constancia de la importamcia del cantaor: "Miguel se ha convertido en una máxima figura del género. Aún diría más, lo es, como debe, de la música española en general. Estos espacios no se regalan."



13 Cantes 13.

Con recuerdos a zambra comienzan unos tientos en honor a la Niña de los peines acompasados y letales con la guitarra de Parrilla que ata el cante a la memoria de los tiempos. mientras Poveda doma las clásicas melodías.

De momento, Manuel Parrilla que sigue enjundiado y Diego del Morao nos situan en el corazón de Jerez, el soniquete contagia los valientes registros del catalán que al pasar al cuplé hace uso de los recursos de Pitingo con una preciosa letr; "Quiero que me formes como el alfarero,hazme como quieras,conforma tus deseos."

Turno para los fandagos en el aire de soleá, estilo María La Sabina, la que conocimos en Rito y geografía, posiblemente lo más flojo del disco, abuso de facultades para un resultado plano. Le acompaña Isidro Muñoz

Sigue Isidro componiendo y el sabio Paco de Lucía con la guitarra para unas alegrías en las el támden que forma con Poveda brilla sobremanera con luz salinera, con resonancias de cantiñas prehistóricas que rematan con un estribillo coral lleno de flamenquería. Por momentos en un tercio "resbalao" por abajo; "No digo yo rías, no digo y que no goces, lo que digo es que bajes la musiquita del coche" recuerda al Mercé de "Aire".

Y de pronto, una calma inmensa. El maestro Sanlúcar en su mundo de fantásticos acordes aprieta las riendas, se templa y le coloca el toro de la Malagueña a un afinado Poveda. El estilo que Matrona insinuó pudiera ser de la Peñaranda y que Morente terminara de bautizarla en uno de sus discos recuerda a Chacón, sirve para dar mesura y equilibrio.

Pero poco dura la placidez, la dictadura del ritmo se impone por tangos de Triana. Ahora el catalán se pone el delantal de lunares y se adivina un patio de vecinos del arrabal sevillano con toda la gracia y el ange de Rafael El Negro o Matilde Coral. Poveda se agiganta y chorrea Triana pura secundado por un elegante y contundente toque en el que destaca una exquisita falseta que nunca pierde el aire trianero. Enormes Guerrero y Bolita.

El compás se amalgama y la soleá apolá rememora a Silverio, Mairena e Yllanda. Declaración de intenciones en la letra: "Soñe un día que al cante lo llamaban libertad". Poveda contrapone en Con-Vivencia, que así se titula el cante, dos estilos interpretativo. Una versión acompasada del Charamusco Mairenista, muy personalizada, le da la mano al cante soleaero de Pepe Marchena más ralentizado donde caben los recursos melismáticos tan característicos del de la gorra(Marchena). De cierta manera pone de relieve una nueva corriente de pensamiento-sentimiento, aquella que profesan la nueva legión de aficionados prestos a disfrutar sin complejos de toda la paleta cromática del universo jondo. Ajustado y enjudiado acompañamiento de Chicuelo.

La belleza del cante levantino se materializa en un filón minero con la guitarra de Juan Ramón Caro con la que homenajea Miguel a Pencho Cros. El preciosita toque de Caro alumbra como un candil la minera austera, oscura y profunda de Poveda que rinde tributo a una tierra, La Unión, que tan orgullosa está de él, que desde hace mucho lo lleva de estandarte.



Dejamos la mina y una luz alegre nos ciega de gusto. En este baile de disfraces toca el traje de piconera y Poveda vuelve a nacer en el barrio gaditano de La Viña por buerías en tonos mayores. Poveda abre la puerta de su bujío con una salerosa letra y se matricula cum laudem en soniquete. De pronto una voz arenosa y negra nos recuerda que Cádiz tiene un rey, Rancapino."Ay que la jambre la vamo a sentí..que mire usté que crisi tiene este país"

Otro alarde de versatilidad, el cante por sevillanas. Acompañadas y compuesta por Isidro Muñoz resultan acancionadas, las dos primeras, y corraleras, las dos últimos. Ahora el tren sale de Lebrija en busca de la seguiriya trágica jerezana.

Un Manuel Parrilla que matiza cada nota seguiriyera en una falseta que viene de rocorrer toda la historia de un pueblo ambienta un más que digno cante por lo jondo. Un pozo que llega hasta los puertos cabales. Lástima de color de voz.

Quintero-León-Quiroga-Poveda. ¡Vaya cuadro! A compás de bulerías se cuenta una historia entre café cantante y miseria humana en el terreno que dió la gloria al cantalán. Coplerías para la Piquer.

El sueño llega con la "Nana de los Rosales", la que popularizara Bernardo el de Los Lobitos con una bella adptación musical de El Bolita pero que lejos de completar el disco da la impresión de sobrero, fuera del tono de todo el trabajo.

ArteSano, un laberinto de espejos donde se reflejan gran parte de los grandes del cante pero en el que siempre descubrimos el contorno de Poveda. Una figura que siente y se siente flamenco, que se parte donde flaquea y se crece donde manda. Creador de arte y artesania que deslumbra al que no chanela de metales y conforma a los de las cuevas. Un rey midas del compás, la pena y la estampa, en definitiva un artistaSano.

3 comentarios:

  1. Buenas tardes:

    No sé si me expresaré bien o incluso si está bien formulada la pregunta pero te la hago.
    ¿Es más cante jondo o más flamenco antigüo este trabajo de Miguel comparado con los últimos discos de José Mercé?
    A mí me gusta José Mercé, y con los arreglos que hace a sus obras pues suenan a ese flamenco jondo transportado a nuestros días, y qué tal vez pierda pureza, ¿no sé?. Y veo a Poveda en la línea pero no se si es comparable.

    Un saludo.
    José Mª Ortega

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  2. Muy buenas, José Mª:

    Mercé y Poveda en el cante solo comparten los ceros de su cuenta bancaria...El jerezano hace tiempo que graba discos comerciales en detrimento del cante, posiblemente José tenga uno de los "rajos" más flamencos de la actualidad, un sonido insorbonable y precioso, lleno de matices y contundencia pero sus trabajos discográfgicos son otro cantar...Posiblemente "Aire" fue el últimno disco que aunó calidad y cantidad, los siguientes cargados de canciones aflamencadas pienso que tienen poco valor artístico, ahora bien cuando se sienta en una de nea te puede partir el corazón.
    Poveda sin embargo no posee los metales de Mercé pero tiene gusto para hacer las cosas. Este disco ertá basado en el flamenco clásico(evito los términos jondo, puro o antiguo) con una perspectiva actual. No inventa, no aporta erpo es un buen intértprete y un extreaordinario artista.
    Espero haber dejado clara mi opinión al respecto, un saludo.

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  3. Perfectamente explicado.
    Yo veo que Mercé en sus últimos disco ha optado por hacer caja, pero tiene una voz extraordinaria.
    Y creo que Miguel ha hecho cosas menos comerciales como puede ser su disco de coplas, pero más gratificantes para un artista.
    Pero respecto a sus capacidades o voces los mezclaba o más bien dudaba, ya mucho más claro.

    Muchas gracias, un saludo.

    José Mª Ortega

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