Cuando están a punto de cumplirse 101 años del nacimiento y 27 de su fallecimiento, el cantaor más importante de la historia del flamenco va a ser galardonado con el título de hijo predilecto de la provincia de Sevilla. La agencia EFE ha publicado la información, en la que también van a ser galardonados otros flamencos como Manuel Gerena o Miguel Poveda.
Antonio Cruz García, no fue un cantaor más. Su aportación a la sistematización, recuperación, creación y recreación de los cantes apoyado en una interpretación exquisita de los distintos palos lo encumbraron, ya en vida, a lo más alto del panorama flamenco y que en este 2010 sigue vigente su legado.
Desde su aportación al cante para bailar con los grandes de la época, su revolución discográfica, la difusión de nuestra música en escritos, tertulias radiofónicas o conferencias, con la introducción del flamenco en las universidades, el apoyo a los festivales flamencos en sus comienzos, el valor añadido que concedió a la llave del cante, su colaboración con las instituciones flamencas como la ITEAF, el impulso para el reconocimientos de grandes figuras por la sociedad andaluza(como la puesta en marcha del monumento a Pastora Pabón en Sevilla) hasta la relación entre música, melodía y ritmo, con las letras adecuándolas con un sentido metafísico, nunca antes conocido en el mundo de lo jondo.
Estética y ética al servicio del cante convirtiéndolo en arte culto.
Mi generación está por encima del mairenismo como gueto fundamentalista y por supuesto de esa corriente surgida en los 80, contraria a Mairena que con la bandera de un aperturismo estilístico-musical, necesitaban a toda costa silenciar la obra del cantaor de Los Alcores. Ambas corrientes, a veces extremistas, erraban en sus posturas ya que, es inevitable que se evolucione y que se descubran nuevos datos históricos que echen por tierra teorías andamiadas en los 60, con los conocimientos de su tiempo, pero también es inevitable que la catedrática obra de un genio salga a flote y se reconozca como fuente y manantial de música flamenca para la historia.
Pase y lo verás
que el oro fino no ha perdío su brillo
ni lo perderá
EL que ya fuese Hijo adoptivo de Sevilla, predilecto de Mairena y de Andalucía, Medalla de plata al mérito del trabajo, III Llave del cante, y recibiera de manos del rey, Don Juan Carlos, la Medalla de oro de las bellas artes, va a ser, a título póstumo, hijo predilecto de la provincia de Sevilla
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